CARLOS I DE ESPAÑA

Dos pequeñas historias que tienen en común a este Rey de España, hijo de Juana la Loca y Felipe el Hermoso.

Una frase hecha de nuestro idioma: “Poner una pica en Flandes”.

Imagen de los Tercios de Flandes

 Aunque hoy se utiliza menos, esta frase se usaba cuando se conseguía algo de especial dificultad. Su origen se remonta al reinado de Carlos I de España y V de Alemania.

Por aquel entonces España tenía posesiones en los Países Bajos y aunque Flandes era solo una de sus provincias se usaba ese nombre para referirse a todas.

Piqueros

Época en la que el Imperio Español estuvo envuelto en varios conflictos y guerras que hacían complicado formar un ejercito y hacerlo llegar a Flandes. La pica hace referencia al “piquero” que era el soldado que la llevaba. Tan costoso suponía encontrar reclutas que quisieran alistarse como caro el largo viaje hasta Flandes. Los Tercios españoles tenían que hacer filigranas económicas para conseguir “poner las picas allí”, de ahí que cuando algo cuesta conseguir se utilizara esta expresión.

El primer viaje de turismo

Carlos I de España se casó el 11 de marzo de 1526 en los Reales Alcázares de Sevilla con su prima Isabel de Portugal.

Decidieron pasar su Luna de Miel en Granada. El viaje duró varios meses y allí el rey se dedicó a la caza, la música, la comida y las fiestas. Pero también tuvo que afrontar problemas como la revuelta de los moriscos, el control de sus posesiones y la guerra contra la Liga de Cognac.

Aunque el viaje estuvo condicionado por los acontecimientos políticos lo lúdico no se quedó atrás y podríamos considerarlo entonces como uno de los primeros viajes de novios.